EL EMPERADOR DE PARÍS (L’Empereur de París) 2019

Direccción: Jean François Richet

 

Inspirada en hechos reales durante el Imperio napoleónico, “El Emperador de París” narra las aventuras de un famoso delincuente de aquella época, protagonista de épicas fugas de diferentes prisiones de Francia: Eugène François Vidocq.

La habilidad de Richet para filmar policiales la hemos visto en “Mesrine: Enemigo Público N°1” de 2010, protagonizada también por Vincent Cassel.  Así es como el siempre atractivo Vincent salta, dispara, cae por las escaleras y mata, con la misma astucia, pero a comienzos del siglo XIX.

El hecho de que sea una película de época, suma y seduce, por las atractivas imágenes de galerías subterráneas, túneles y escondites, por los que persigue y huye Vidocq, como también por los salones imperiales donde transitan los funcionarios de gobierno, con brillante o escasa iluminación de acuerdo a cada escena. Son espléndidos los planos desde los techos de la París imperial.

Vidocq busca su indulto, convenciendo al Director de Policía de que solamente él podría atrapar a los criminales más  peligrosos de París, y se pone en marcha, colaborando con las fuerzas de seguridad de la ciudad. Pero la mente más sanguinaria, el villano más violento, interpretado por el actor alemán August Diehl, lo pone en máximo riesgo.

Por supuesto también hay lugar para el amor. Freya Mavor y Olga Kurylenko aportan su belleza y picardía, como parte del inframundo delictivo al que pertenece Vidocq.

“El Emperador de París” es una comedia policial, bien filmada y divertida.